Celebración
¿Pensabais que ya me había ido, eh? Bueno pues todavía sigo por aquí, el viernes por la tarde finalmente despegamos en un viaje (horriblemente largo) que nos llevará a Australia y Nueva Zelanda.
Si, nos vamos a las Antípodas a celebrar una de las decisiones más complicadas que hemos tomado en los últimos años. Después de, literalmente años, informándome, leyendo, hablando con amigas y en fin, dándole muchas vueltas al asunto hace unos meses decidimos que no vamos a tener hijos. Esto es algo increíblemente personal y las que me leéis habitualmente sabéis que no son temas que yo suela tratar. A pesar de todo y de lo que me está costando escribir algo tan íntimo creo que también es necesario hablar de un tema del que nadie habla y sobre el que a mi me ha costado horrores encontrar información, de hecho creo que en español no conseguí encontrar nada.
Durante muchos años medité la opción de tener o no hijos y siempre me lo planteé de manera de cómo sería y cambiaría mi vida si los tuviera. No sé cómo tarde tantísimo tiempo en plantearlo justo al revés…¿cómo sería mi vida si no tuviera hijos? Y de pronto, lo ví más o menos claro. Aún así, por el camino he tenido que des-aprender un montón de conceptos sobre egoísmo, miedo a la vejez, soledad y otras muchas cosas que no siempre han sido fáciles pero si bastante interesantes.
Hay pros y hay contras pero después de un análisis de lo que es mi vida y cómo realmente me gustaría vivirla llegué a la conclusión de que puedo vivir sin tener hijos, me voy a perder cosas increíbles soy del todo consciente, pero eso siempre pasa cuando tienes que elegir.
Hace poco le comentaba a una amiga la envidia que me daba la gente que siempre ha tenido claro que quieren o no quieren tener hijos. Yo nunca lo he tenido claro, la decisión me ha costado muchísimos años tomarla, y tengo la suerte de que es algo en lo que mi pareja piensa exactamente como yo…así que ahora me siento realmente como si me hubieran quitado un gran peso de encima.
Una vez tomada la decisión lo comunicamos a amigos y familiares (exactamente igual que cuando alguien se queda embarazada) y decidimos que había que celebrarlo con un viaje, con un gran viaje….Para nosotros esta decisión es tan importante como lo hubiera sido quedarnos embarazados, es el principio de una nueva vida, de hacer planteamientos a largo plazo y de replantearse un montón de historias.
Nos vemos a la vuelta ;)
PD. Por supuesto tenemos un Plan B en el que pensamos abrumar a nuestros sobrinos con regalos exóticos de nuestros viajes para que cuando seamos viejecitos cuiden de nosotros…¡aquí está todo pensado!
PD 2. Ya más en serio, en mis búsquedas de información descubrí que en Ravelry hay un foro con enlaces y bibliografía muy interesante sobre este tema llamado Chilfree by choice.
Si, nos vamos a las Antípodas a celebrar una de las decisiones más complicadas que hemos tomado en los últimos años. Después de, literalmente años, informándome, leyendo, hablando con amigas y en fin, dándole muchas vueltas al asunto hace unos meses decidimos que no vamos a tener hijos. Esto es algo increíblemente personal y las que me leéis habitualmente sabéis que no son temas que yo suela tratar. A pesar de todo y de lo que me está costando escribir algo tan íntimo creo que también es necesario hablar de un tema del que nadie habla y sobre el que a mi me ha costado horrores encontrar información, de hecho creo que en español no conseguí encontrar nada.
Durante muchos años medité la opción de tener o no hijos y siempre me lo planteé de manera de cómo sería y cambiaría mi vida si los tuviera. No sé cómo tarde tantísimo tiempo en plantearlo justo al revés…¿cómo sería mi vida si no tuviera hijos? Y de pronto, lo ví más o menos claro. Aún así, por el camino he tenido que des-aprender un montón de conceptos sobre egoísmo, miedo a la vejez, soledad y otras muchas cosas que no siempre han sido fáciles pero si bastante interesantes.
Hay pros y hay contras pero después de un análisis de lo que es mi vida y cómo realmente me gustaría vivirla llegué a la conclusión de que puedo vivir sin tener hijos, me voy a perder cosas increíbles soy del todo consciente, pero eso siempre pasa cuando tienes que elegir.
Hace poco le comentaba a una amiga la envidia que me daba la gente que siempre ha tenido claro que quieren o no quieren tener hijos. Yo nunca lo he tenido claro, la decisión me ha costado muchísimos años tomarla, y tengo la suerte de que es algo en lo que mi pareja piensa exactamente como yo…así que ahora me siento realmente como si me hubieran quitado un gran peso de encima.
Una vez tomada la decisión lo comunicamos a amigos y familiares (exactamente igual que cuando alguien se queda embarazada) y decidimos que había que celebrarlo con un viaje, con un gran viaje….Para nosotros esta decisión es tan importante como lo hubiera sido quedarnos embarazados, es el principio de una nueva vida, de hacer planteamientos a largo plazo y de replantearse un montón de historias.
Nos vemos a la vuelta ;)
PD. Por supuesto tenemos un Plan B en el que pensamos abrumar a nuestros sobrinos con regalos exóticos de nuestros viajes para que cuando seamos viejecitos cuiden de nosotros…¡aquí está todo pensado!
PD 2. Ya más en serio, en mis búsquedas de información descubrí que en Ravelry hay un foro con enlaces y bibliografía muy interesante sobre este tema llamado Chilfree by choice.
Etiquetas: celebraciones, viajes, vida